¿De qué depende el precio en el copywriting?

Precio copywriting
A menudo se confunden los servicios de copywriting y el de redactor de contenidos. En el post de hoy te contamos sus diferencias en cuanto a contenido, funciones, precio, formatos...

La confusión entre los clientes

A menudo nos llegan mensajes del tipo “¿pero cuánto me vas a cobrar por esto?”. Los precios de copywriting son algo ambiguos, no se puede dar un precio exacto y asegurarle al cliente que no va a ser ni un céntimo más. Podemos dar un presupuesto aproximado y por supuesto, adaptarnos al precio que propone el cliente pero nunca dar una cifra exacta.

También nos  llegan a menudo mensajes asegurando que quieren contratar un creador de contenidos y a la hora de ponernos a analizar las necesidades del cliente nos damos cuenta de que, lo que realmente busca es un copywriter. Así que es súper importante diferenciarlo. Y nosotros estamos aquí para ayudarte.

Copywriting VS Creador de Contenidos

En primer lugar, el copywriting tiene como principal función la comercial. Su función es la de conseguir que el lector realice una función concreta como: pinchar sobre el anuncio, suscribirse a la newsletter, comprar el producto…Lo debe hacer mediante textos interesantes y muy creativos.

La función del creador de contenidos es aportar valor a la audiencia. Puede ser información, un formato más educativo, inspiración o simple entretenimiento. Al crear contenidos tenemos mucha más libertad. Como no estamos vendiendo como tal, el lector se siente menos cohibido y le resulta más interesante. Así que el formato también es más libre.

Los contenidos de cada uno

Pues bien, por un lado tenemos al copywriter intentando que se realice una acción. Y para ello, su contenido aparecerá en anuncios. Estos pueden aparecer en cualquier medio: radio, televisión, redes sociales, prensa e incluso banners.

También suele ser encargado de realizar el material impreso como los carteles, los folletos o los flyers. Las páginas web y sus landing page están en la lista de tareas del día, dado que ahí es donde se consigue la conversión. Y por último el email marketing, aquellos correos electrónicos destinados a clientes potenciales.

Por el contrario, el creador de contenidos se encargará de tareas  como los post para redes sociales, entrevistas, podcast, tutoriales, entrevistas, presentaciones, newsletter…

¿Para que se crea todo esto? Para acompañar al cliente potencial en toda tu hoja de ruta y después es cuando entra el copywriting y es quien cierra la venta. ¿Ves la importancia de combinar ambas?

Longitud del texto

No hay una  medida perfecta, ni para un copy ni para un texto para redes. Una de las claves para el copywriting es evitar  la “paja” y saber ir al grano. Como clientes a nosotros tampoco nos gusta que nos estén dando mil vueltas y que no lleve a ningún lado. Así que nuestro primer consejo es que escribas como si fueses el cliente. ¿Qué te gustaría leer a ti? Pues esa es la respuesta a todo. Es como el dicho de “trata  como te gustaría que te tratasen a ti”. Hoy estás del lado de la empresa, pero quizás mañana seas el cliente.

La longitud de un texto la decide el autor pero depende de la audiencia. Si eres una empresa recién llegada al mercado necesitarás un copy más extenso para poder contarle a tus clientes mucho más de ti. Necesitarán conocimientos sobre tu marca y tus productos. Si en cambio estás bien asentado y ya tienes creada una identidad de marca con un copy breve será suficiente. Así que ya ves que todo pasa por la investigación. Debes conocer muy bien a tu cliente y más aún conocerte a ti mismo. Saber cómo llegar a este, que conocimientos tiene, dónde se encuentra, cuántos años tiene, cuáles son sus  intereses.

En cambio, un creador de contenidos suele tener  establecido X€/palabra y tu presupuesto  dependerá de la longitud del texto. Según la web Zaask, una plataforma online dedicada a contratar servicios locales por particulares, el precio de estos suele oscilar entre los 0,02€/palabra y 0,06€/palabra. Normalmente, se suele ofrecer un descuento.  Es decir, cuanto más extenso sea el texto, más económico sale.

Si volvemos al tema del precio, nos daremos cuenta de que un copywriter normalmente cobra por el copy realizado y un creador de contenido cobrará por palabras. Además, dentro de los copywriter encontramos al “junior” y al “senior”. Evidentemente, se clasifican según los años de experiencia y el precio del senior es bastante superior al del junior.

El tiempo de investigación

El tiempo que le dedica el copywriter y el creador de contenidos tampoco es el mismo. Ten en cuenta que la venta depende del primero, por lo que, debe conocer muy bien a la audiencia. Toda la responsabilidad de la empresa recae sobre esta figura y por eso es tan importante contar con profesionales. Si no hay ventas, la empresa cierra. Es así de duro. 

En negocios que solamente comercializan online todavía es más importante porque los textos son sus comerciales. Dependiendo de lo atractivo que sea el texto realizarán la compra o no. Por eso ahora ha cobrado tanta importancia la figura del copywriter.

En cambio,un creador de contenidos solamente debe conocer la empresa y saber un poco las características del cliente pero no necesita este análisis tan profundo. Al final de lo que se trata es de darle contenido interesante. Por ejemplo, si es una empresa que comercializa coches, el creador de contenidos deberá conocer este “mundillo” y estar al tanto de las novedades. Después, en redes sociales, puede compartir contenido sobre la evolución de los coches eléctricos  y cómo se ven de cara a los próximos años. 

Simplemente está dando información pero no está persuadiendo al lector para que lo compre, ¿ves la diferencia?

¿Cómo se entrega?

Dado que nuestra forma de trabajar es global, a nosotros nos gusta hacerle una presentación al cliente. 

Es decir, presentarle nuestra propuesta con el texto y la imagen para su próximo anuncio, su post para Instagram o su landing page. No lo hemos comentado anteriormente porque nos resulta obvio pero es muy importante el contenido audiovisual que proporcionamos. Es decir, buscamos las imágenes minuciosamente y seleccionamos aquella que mejor se adapte a nuestras palabras, al formato y a la audiencia.

Las formas de presentación son infinitas. Normalmente optamos por las presentaciones, pero dependiendo de cuál sea el contenido también hacemos documentos Word, vídeos o diseños.

Para post, lo mejor es mostrarlo a través de un diseño. Tal cual lo va a ver nuestro visitante. Para una landing page optamos por una presentación y para un folleto por un diseño.  Todo depende de tu presupuesto, del contenido, del cliente, del formato elegido…

El presupuesto final

Pues bien, como ya hemos dicho no podemos darte un precio exacto. Nos encantaría poder darte una cifra con todos los céntimos contabilizados y exactos, pero como no podemos, lo único que podemos prometer es ajustarnos a tu presupuesto.

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